
Si ya llegó a las 40 semanas de gestación y todavía no se ha presentado el parto, el mejor consejo es ser paciente. Es importante recordar que los bebés llegan cuando están listos. Mientras espera el gran día, puede hacer ejercicios prenatales para que el bebé se ponga en posición, y ayude a que el trabajo de parto comience. También ayuda el caminar, y el tener relaciones sexuales.
Una de las razones más comunes por las que una no se ponga de parto es que puede que el bebé no esté en la posición adecuada. Se puede ayudar a que el bebé se “encaje” en la pelvis haciendo ejercicios prenatales, saliendo a caminar, y moviendo las caderas.
Algunos ejercicios pueden alentar el inicio del trabajo de parto, mientras que otros pueden ayudar a avanzar el trabajo de parto temprano una vez que hayan comenzado esas contracciones iniciales. De cualquier manera, se trata de centrarse en ejercicios que calmarán su sistema nervioso central.
Si está tratando de inducir el parto, no eleves tu ritmo cardíaco ni causes estrés en el cuerpo. Esto puede evitar el trabajo de parto, o incluso revertirlo. La razón: cuando el ritmo cardíaco sube, el cuerpo reacciona con una respuesta de lucha o huida. Y para dar a luz, obviamente quieres apertura en tu área pélvica, no tensión.
Además de encontrar una respiración lenta y rítmica, comience a moverse de una manera que la relajen a usted y al bebé. Los ejercicios que relajan el suelo pélvico y abren las caderas son ideales para ayudar a mover el trabajo a la siguiente fase.

Pose de mariposa: Hacer ciertas posturas de yoga prenatal para inducir el parto, como la postura de la mariposa, puede ser particularmente útil a medida que su cuerpo pasa al evento principal. Siéntate en el suelo con las rodillas abiertas y las plantas de los pies juntas. Puedes colocar las manos debajo de las rodillas para apoyarte. Mientras inhalas, siéntate alto para que la parte baja de la espalda tenga una curva natural (como Cow Pose o pose de vaca) y expande el pecho hacia adelante y hacia arriba. Mientras exhalas, baja la barbilla, inclínate hacia atrás y redondea la espalda (como Cat Pose o pose de gato). Repite este movimiento de cinco a 10 veces, o siempre y cuando se sienta bien. Ambos movimientos son importantes para el pujo. Cuando encuentras la curva natural de la espalda baja, puedes acceder a más potencia a medida que pujas con la barbilla hacia el pecho (bear down).

Curva hacia adelante apoyada: Encuentra algo resistente que puedas sostener, como una pared, una encimera (counter) de cocina o una barandilla de escalera o el espaldar de una silla. Coloque sus piernas paralelas entre sí, separadas por el ancho de las caderas. Agárrate a tu soporte, dobla las rodillas y estira las caderas hacia atrás, presionando también la parte superior de los muslos hacia atrás. Saca las caderas para hacer espacio en la pelvis. Ahí es donde el bebé necesita más espacio para salir. Haga esto mientras se sienta bien, moviendo las caderas de lado a lado, tomando respiraciones largas y profundas a medida que alarga la columna vertebral y expande la parte posterior de su pelvis.

Sentadillas apoyadas: Las sentadillas apoyadas ayudan a fortalecer los glúteos y las piernas, estiran el suelo pélvico y animan al bebé a moverse hacia abajo. Estirar el suelo pélvico ayuda a su cuerpo a relajarse. La posición de sentadilla completa (llamada malasana en el yoga) ayuda al bebé a comprometerse más profundamente en la pelvis. Para empezar, pon la espalda contra una pared. (Considere colocar una pelota de ejercicio entre la espalda y la pared, contra la que pueda apoyarse para aliviar la presión de la parte baja de la espalda). Coloque los pies separados aproximadamente al ancho de los hombros, con los dedos de los pies apuntando ligeramente hacia afuera. Dobla las rodillas y baja tan bajo como te sientas cómodo, exhalando en el camino hacia abajo. Mientras trabaja en estas sentadillas para inducir el parto, mantenga las rodillas apuntando mientras regresa lentamente a la posición inicial en la inhalación.

Rebote de pelota de ejercicio: Rebotar suavemente en una pelota de ejercicio para inducir el parto no solo anima al bebé a moverse hacia abajo y, a su vez, ayuda con la dilatación del cuello uterino, sino que también puede calmar al bebé. Siéntate en la pelota de ejercicio, con las piernas bien separadas, y mueve las caderas hacia arriba y hacia abajo. El movimiento alienta el suelo pélvico a contraerse y relajarse de forma natural. El rebote suave también permite que la columna vertebral se descomprima, haciendo un poco más de espacio entre las vértebras, lo que puede aliviar la tensión en la parte baja de la espalda. Rebota durante unos minutos a lo largo del día.

Baile lento: Si quieres ayudar a avanzar en el trabajo de parto temprano, este podría ser un buen ejercicio para inducir el parto activo. Coloque sus brazos alrededor del cuello de su pareja o persona de apoyo de parto, y permítase apoyarse en ellos y relajarse. Mueve las caderas de lado a lado. Sacudir las caderas invita a la sensación abierta que quieres en tu pelvis. Este simple movimiento puede ayudarte a encontrar un ritmo natural y apoyar el flujo descendente de energía que quieres durante todo el nacimiento. Es más, si estás haciendo este movimiento con tu pareja, conectar con alguien que amas libera oxitocina, una hormona natural que se dice que te ayuda a mantener la calma y a lidiar mejor con el dolor.
Cada vez más personas gestantes desean prepararse para el parto, con el fin de evitar intervenciones medicas innecesarias, y prepararse conscientemente para el tipo de parto que desean tener.
El libro “Preparándote para un Parto con Conocimiento” proporciona información clara y concisa, basada en los últimos estudios médicos, brindando diversas opciones de manejo de parto, de forma que la persona gestante pueda comparar y contrastar, como a su vez, evitar procedimientos innecesarios. Este libro comparte información sobre:
El manejo del parto natural
Lo que realmente sucede durante el trabajo de parto
Como hacer que el parto sea placentero
Opciones y manejo del parto medicalizado
Consejos para maximizar las posibilidades de un parto natural
El parto por cesárea
El libro "Preparándote para un Parto con Conocimiento " está disponible en https://amzn.to/3Tn1vHD
Mientras que el embarazo es un momento emocionante y alegre, cuando se nos va acercando la fecha probable de parto, a muchas esto le causa ansiedad. Sin embargo, con la orientación, la educación, y el apoyo adecuado, esas ansiedades pueden aliviarse. Es por esto por lo que las clases de parto son tan beneficiosas.
Para hacer una cita para clases o consultas, llene el siguiente formulario: https://forms.gle/t5bmeWdBNGR1yzYh6
Se ha demostrado que la educación sobre el parto reduce el miedo y la ansiedad, a la vez que aumenta la confianza. Un estudio publicado por el American Journal of Obstetrics an Gynecology se mostró que el tomar clases de parto reduce los resultados adversos al parto, como la inducción fallida, y las cesáreas no planificadas. Se piensa que esto se debe al mayor conocimiento y las habilidades que se adquieren en las clases de parto.
Las clases impartidas por el Centro Lacted tienen un mayor alcance, ya que cubren una mayor variedad de opciones disponibles tanto para la gestante como para su acompañante, enfocándose en una amplia gama de opciones en lugar de una simple visión sobre el parto, permitiéndole a la parturienta elegir lo que mejor satisfaga sus necesidades durante el trabajo de parto y parto.
Las clases combinan los diferentes metodos de parto tradicionales, como Lamaze, Bradley, Alexander e Hipnoparto.
Con las técnicas de Lamaze se le enseña a la gestante a utilizar técnicas de relajación y de respiración junto con la asistencia el acompañante para experimentar un parto más relajado.
Con las técnicas del metodo Bradley se hace hincapié en el ambiente especial durante el trabajo de parto—un ambiente calmado, sereno, cómodo.
Con las técnicas del método Alexander se le enseña que el dolor es algo totalmente normal y natural durante el trabajo de parto y se le enseña a la parturienta a utilizar posiciones y movimientos que ayudan a lidear con el dolor y facilitan el parto.
Por último, las técnicas de hipnoparto le enseñan a la gestante cómo utilizar la autohipnosis para reducir los malestares del parto, alcanzando el autocontrol y la relajación.
Recurso: Carmen Cabrer IBCLC, IYCFS, CLAAS

Para hacer una cita para clases o consultas, llene el siguiente formulario: https://forms.gle/t5bmeWdBNGR1yzYh6
#embarazo #gestacion #nacimiento #parto #posparto #lactancia #amamantamiento #ibclc #doula #consultoradelactancia
#clasesdeparto #clasesprenatales #yogaprenatal #bellydancingprenatal #doula #quiropractico #partovaginal #vbac #tolac
Comments